Paucartambo, a medio camino entre la ciudad de Cuzco y el valle de Pilcopata en la selva, fue paso obligado de comerciantes y tropas conquistadoras en su camino a la selva, tanto en el Tawantinsuyu como en la Colonia.
Esta condición de tránsito explica la diversidad de tradiciones musicales y dancísticas que se encuentran en esta ciudad y que se manifiestan en todo su esplendor en la fiesta de la Mamacha Carmen (16 de julio), donde mitos y creencias prehispánicos se entremezclan con la devoción católica, parte del sincretismo presente en la religiosidad popular andina.