El Centro de Música y Danza de la Pontificia Universidad Católica del Perú (CEMDUC) fue fundado en 1992 sobre la base de la fusión del Grupo de Folklore de la PUCP (FOLKPUCP), del Núcleo de Arte Colectivo de la PUCP (NACPUCP) y de las distintas agrupaciones de música y danzas peruanas que funcionaban activamente en nuestra universidad desde 1975.
Desde su fundación, el CEMDUC asume en sus estatutos la práctica del arte como un derecho cultural de toda persona de acuerdo con la Declaración Universal de los Derechos Humanos. En ese sentido, la reivindicación de este derecho en el contexto universitario reafirma el carácter de hacer arte no solo por afición, sino con el firme propósito de complementar la formación humanista de quienes conforman el CEMDUC. Por ello, nuestro centro pone a disposición de los miembros de la comunidad universitaria (estudiantes y egresados de todas las especialidades, docentes y personal administrativo) la posibilidad de acceder a la práctica individual y colectiva de nuestra música y danzas peruanas.
Actualmente, el CEMDUC pertenece a la Dirección de Asuntos Culturales (DACU). La DACU es una de las unidades del Vicerrectorado Académico de la PUCP.
El CEMDUC está constituido por tres núcleos operativos.
GRUPO CEMDUC
El Grupo CEMDUC es el elenco permanente de música y danzas peruanas de la PUCP y está conformado por los siguientes conjuntos:
ESCUELA ABIERTA
La Escuela Abierta del CEMDUC es un espacio de promoción y difusión de canto, música y danza a través de cursos libres dirigido al público en general.
ÁREA DE INVESTIGACIÓN Y PROYECCIÓN SOCIAL
El cuidadoso estudio y la respetuosa investigación de nuestras manifestaciones culturales son prácticas responsables para la preservación de nuestro folklore nacional. Por esta razón, este núcleo operativo concentra una serie de actividades relacionadas con el quehacer de la investigación de nuestras tradiciones.
Asimismo, el CEMDUC organiza talleres y/o presentaciones de música y danzas peruanas dirigidos a albergues infantiles, asilos de adultos mayores, penitenciarías y otras instituciones con miras a contribuir con el desarrollo personal de quienes también forman parte de nuestra sociedad.